Los elementos de un baño (lavabo, wc, bañera o ducha, etc.) están conectados a un sistema de desagüe que por gravedad arrastra el agua hasta la bajante, que es la tubería principal del edificio que desemboca en el alcantarillado. Por tanto los elementos del baño deben evacuar agua, pero a la vez no pueden dejar salir ningún aire de la tubería pues traería mal olor. Para conseguirlo se utilizan dos métodos:
a) El bote sifónico, que se conoce por que el baño tiene escalón y/o una tapa metálica en el suelo, generalmente junto al inhodoro.
b) Los sifones, que son unas piezas individuales de tubería que tiene cada elemento y que con unas u otras formas se asemejan a la que hay bajo los fregaderos, esa que se desmonta cuando hay un atasco.
Ambos sistemas funcionan reteniendo una barrera de agua que impide que de la tubería pueda salir aire, por lo que de secarse ese agua aunque sea un ápice aparecerán los olores, que puede tener varias causas:
- Un elevado calor unido a una falta de uso prolongado, lo que causa que se evapore el agua y no se reponga. Tienen que darse ambos factores de forma muy acentuada.
- Un sifón demasiado pequeño, que puede acelerar la situación anterior.
- Falta de ventilación en las bajantes, que provoca que el secado pueda darse en pocas horas cuando se combina con las dos causas anteriores.
Respecto al problema de la ventilación, hay que saber que cuando por la bajante del edificio cae agua su arrastre mueve el aire bajo el torrente, lo que necesariamente implica que se mueva el aire sobre él. Esto provoca un cambio de presión en el interior de la bajante, por lo cual esta debe de estar abierta por el tejado para compensarlo absorbiendo aire. Si no existe esta ventilación vertical el cambio de presión incidirá directamente en los sifones tragándose su agua, es lo que se puede entender como "des-sifonado" y que en realidad se llama "sifonado".
La solución a este problema puede pasar por revisar la abertura de la bajante en la chimenea, pues puede haberse obstruido. O una vez en el tejado para revisarlo puede descubrirse que no existe tal abertura. Si es este el caso el problema de olores se da en todos los baños del edificio, y entonces caben dos medidas:
A) Hacer obra a nivel de chimenea y abrir la bajante, para lo cual habrá que picar seguramente en el penúltimo piso, donde conectar un tubo de abertura y sacarlo por el tejado.
B) Instalar unas válvulas de aireación, que harán el necesario efecto de chimenea desde el interior del edificio. Su misión es permitir que en la bajante entre aire, pero que no salga.
Las válvulas necesitan tener una capacidad de absorción de aire suficiente, y las genuinas son unas en forma de seta inventadas por Studor, que en la actualidad ofrece entre otras variantes:
MaxiVent, que es una gran válvula que se conecta a la bajante y en obra nueva (Código Técnico de la Edificacion de 2007, documento HS) permite prescindir de la construcción de chimenea para su ventilación. Una MaxiVent es capaz de alimentar 5 alturas.
MiniVent, que es el mismo concepto pero para instalación individual en cada baño. Puede acoplarse en un sifón que esté accesible (normalmente el del lavabo) y al tener menor capacidad requiere de ser instalado en cada uno de los baños del edificio que vayan a la bajante. Cada MiniVent tiene un limitado volumen de absorción, lo que hace necesaria una instalación comunitaria pues a nivel individual ayudará pero seguramente no lo suficiente para resolver el problema.
No entiendo como todos los fontaneros con los que topé desconocían este producto o lo consideraban ineficaz. Estas válvulas tienen el tamaño y diseño adecuados para succionar aire suficiente para evitar el secado de los sifones cuando se debe a la falta de ventilación, incluso instaladas sin cumplir estrictamente todas sus especificaciones (en todos los baños, a una altura mínima, etc.).
Muchísimas gracias al blog de Smacky.